Los precios de las propiedades en Mallorca y las islas vecinas están aumentando de forma constante y significativamente más que en el resto de España: Así lo confirman las cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según estos, el incremento del precio de la vivienda en Baleares en el último trimestre de 2021 respecto al trimestre anterior fue del 9,6 por ciento. Esta cifra es muy superior a la media española del 6,4%. Las cifras actuales recuerdan a los valores de la burbuja inmobiliaria que estalló con la crisis económica de 2008. En 2007, los aumentos de precios superaron el 10% en cada uno de los tres primeros trimestres.
El consejero balear de Movilidad y Vivienda, Josep Marí, ha expresado al «Diario de Mallorca» su preocupación por la actual evolución: «Estas subidas de precios son todo menos positivas porque muchas personas se ven perjudicadas por ellas. Estamos tratando de contrarrestarlo».
Uno de los problemas de las Islas Baleares es la proporción comparativamente baja de edificios nuevos, que no satisface ni de lejos la demanda de la población local y de los posibles compradores extranjeros. Según Marí, la baja proporción de proyectos de nueva construcción está en la naturaleza de una isla: «Estamos limitados tanto en términos de espacio como de recursos. Y hay un consenso social de que hay que proteger las zonas que aún no están desarrolladas». Además, según el ministro, existe una fuerte presión del sector inmobiliario sobre los vendedores para que suban los precios.
Gran proporción de compradores extranjeros
Los compradores extranjeros representan una proporción cada vez mayor de las compras de inmuebles, especialmente en el segmento de precio alto, según muestran las cifras de la Asociación de Agentes del Registro. Mientras que en 2012 se cerraron 520 contratos de compraventa de más de 500.000 euros con compradores extranjeros en Baleares, el año pasado fueron 2.157.
Los ciudadanos de la UE representaron la mayor parte, con 1.889 transacciones. Entre los países no pertenecientes a la UE, los británicos se situaron a la cabeza el año pasado con 158 compras de propiedades. Según la asociación, los extranjeros representaron el 38,9% de los compradores en las islas en 2021.
Esto ha alimentado el debate sobre cómo restringir estas transacciones. La semana pasada ya hubo un debate sobre el tema en el parlamento balear a petición del partido ecologista Més per Mallorca.
Ahora el apoyo vino de una fuente inesperada. Natalia Bueno, presidenta de la Asociación de Agentes Inmobiliarios, se mostró abierta a una restricción. Según ella, la gran demanda del extranjero es un factor importante para el aumento de los precios. Sin embargo, Bueno subrayó que no se distribuyen uniformemente entre todos los municipios de la isla.
En cambio, Luis Martín, de la Asociación de Promotores Inmobiliarios, se muestra escéptico ante el debate. Tal restricción no es compatible con la legislación de la UE. Según Martín, habría que concentrarse mucho más en liberar suelo edificable para viviendas sociales. Además, deberían relajarse las restricciones de altura de los nuevos edificios. Según el presidente de la asociación, las medidas adoptadas hasta ahora por el gobierno de izquierdas «no han funcionado».
Contenido: Mallorca Zeitung - suscríbase al canal de Telegram de MZ - ¡bien informado cada día!